Conclusión

El pensamiento filosófico marxista surge en una coyuntura histórica, donde el hombre necesita respuestas concretas y no simples supuestos teóricos como hasta el momento le ofrecía la filosofía. Marx es el encargado de llevar a adelante esta tarea explicando la enajenación del hombre y demostrando que la marcha de la historia humana es un proceso dialéctico que se expresa a través de las luchas de clases.
Marx dice que la última expresión de ésta lucha es la que protagonizan la clase burguesa y el proletariado, ya que con la abolición del modo de producción burgués, se da paso al comunismo, donde desaparecerán las clases y por ende la lucha entre estas. En esta nueva forma social la sociedad misma es la encargada de regular los medios de producción.
Por lo tanto podemos decir que, para Marx la historia del hombre es el proceso de alienación y marcha hacia su supresión, el proceso cuya meta es la organización racional de la vida humana en plena libertad.
"... Las clases dominantes pueden temblar ante una Revolución Comunista. Los proletarios no tienen nada que perder en ella más que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo que ganar".